De publicista a
diseñadora de moda
En 2005 con 28 años y una pasión por la combinación de colores, los tejidos y cosiendo a máquina de oídas desde niña, cambié la publicidad por una pequeña tienda de ropa de 20m2.
En 2010 volé a Bangkok con la idea de crear mi propia marca. Y así nació Manolita Faldotas. Hacía pequeñas colecciones con una modista en la zona turística de Kaosan. El proceso creativo, aprender el idioma, conseguir los recursos y todos los elementos que componían la colección fue apasionante, muy divertido y enriquecedor.
El proyecto creció con cambio de tienda incluido. Y, después, asistiendo al Salón Internacional de la Moda en Madrid (MOMAD), el salto al por mayor con la primavera de 2015. Tailandia fue el origen del color que define la marca, las tallas únicas, los tejidos elásticos con caída… La personalidad de los diseños. La experiencia más mágica que he vivido a nivel profesional y personal. Llena de retos, esfuerzo, pasión, caídas, alguna lágrima frustrada y perseverancia incansable… Y todo fue, a más de trece mil kilómetros de distancia, un regalo y un privilegio. Un lazo de unión que conservo a día de hoy.
Y, entonces, los "prints" se pusieron en mi camino. En un empeño incansable por trabajar con estampados propios llegué a China y después a Portugal. Y la firma despegó. Ferias, agentes comerciales, el incipiente comercio online, una oficina maravillosa llena de luz y lo más importante: el equipo de las cuatro mujeres más excepcionales que hicieron todo posible. A ellas les estoy inmensamente agradecida.
Con el pico de facturación presupuestado más importante de nuestra historia, y todos los pedidos a punto de salir hacia más de 100 puntos de venta de toda España, Italia y Portugal, un 14 de marzo de 2020, nos confinaron… Y así terminó la primera etapa de Manolita, pero no la última.
En 2022 presenté el proyecto de la firma a una fábrica de confección en Valencia. Con química y una serie de casualidades que no pasaron desapercibidas, comenzó la nueva etapa de “Manolita 100% fabricado en España”. Un lujo y experiencia nuevas para mí; viendo el proceso desde dentro, apreciando y valorando el enorme trabajo e implicación detrás de una sola prenda. Desde el patronaje, el corte y la confección hasta el cuidado de los detalles, el planchado, etiquetado, plegado y embolsado de todas y cada una de las prendas.
Y hoy, casi 20 años después conociendo a la mujer, creciendo y madurando con clientas que hoy lo siguen siendo, acumulando cicatrices de embarazos, cambiando las curvas, ganando kilos o perdiendo la firmeza de la piel, Manolita se va adaptando a la realidad de ellas, a sus cambios y diferentes etapas. Todos estos años aprendiendo y viendo lo que quieren ocultar y lo que quieren mostrar. Buscando la comodidad y brillar honrando su cuerpo.
Por eso decimos que en Manolita no pensamos prendas bonitas y las escalamos para todas las tallas, sino que pensamos en todas las tallas y cuerpos y, para ellas, diseñamos prendas bonitas. Aquí radica la diferencia que conquista a nuestras clientas.
Este es un mundo nuevo, lejos de la esclavitud de las modas y los moldes donde las mujeres sonríen por no tener que encajar donde lo hacen otras. Libres, bellas y protagonistas. Tal y como son. Tal y como están. Únicas.
Marian Boned
CEO y Fundadora de Manolita Faldotas